¿Cómo ayudar a un familiar o amigo con depresión?

Infórmate acerca de la depresión

Cuanto mejor comprendas qué causa la depresión, cómo afecta a las personas y cómo se puede tratar, podrás hablar mejor con la persona que te importa y ayudarla.

Habla con esa persona

Háblale sobre lo que has notado y por qué estás preocupado por él.

Sugiérele la búsqueda de ayuda profesional

Las personas con depresión pueden no reconocer o estar conscientes de su depresión. En esos casos pueden rechazar la idea de un tratamiento. En otros casos, las personas sienten vergüenza de su depresión y creen erróneamente que si otros se enteran, pueden ser calificados como personas débiles o sin carácter. Otros creen erróneamente que pueden superarla solo con la fuerza de voluntad. Pero la depresión rara vez mejora sin tratamiento, e incluso puede empeorar.

Explícale que la depresión es una enfermedad

Aclárale que lo que está experimentando no es un defecto ni una debilidad personal, es una enfermedad como la gripe o la diabetes, y que mejorará con un tratamiento médico.

Ayúdale a buscar atención especializada

Algunas personas que sufren de depresión, no tienen la voluntad, ni la energía para buscar ayuda y someterse a un tratamiento. Implicarse en esa búsqueda es una forma de apoyo emocional.

Ofrécete a acompañarlo a las consultas médicas

Ayúdale a organizar las citas médicas, acompañándolo a estas y asistiendo a las sesiones de terapia familiar. Los miembros de la familia o amigos de confianza pueden participar en el tratamiento. Pero por sobre todo tenga mucha paciencia y sea comprensivo.

Fomenta que siga con el tratamiento

Ayúdale a recordar que tome los medicamentos recetados y que asista a las citas médicas.

Exprésale tu disposición a ayudar

Recuerda que la depresión de tu ser querido no es culpa de nadie. No puedes solucionar la depresión de la persona, pero tu apoyo y tu comprensión será valiosa.

Es posible que el afectado no pueda ocuparse bien de ciertas tareas. Dale sugerencias acerca de tareas específicas que estarías dispuesto a hacer o pregunta si hay alguna tarea en particular de la que te podrías encargar.

Sé paciente

Los síntomas de la depresión mejoran con el tratamiento, pero esto puede llevar tiempo. Para algunas personas, los síntomas mejoran rápidamente después de comenzar el tratamiento. Para otras, demorará más tiempo.

Controla tus emociones negativas

La ira y la rabia son emociones que suelen surgir en los familiares. Esto se debe a la impotencia y la frustración que a menudo se siente por no poder ayudar al familiar afectado. Este enfado no ayuda al paciente, sino que le culpabiliza aún más.

Disponte a escuchar

Hazle saber a tu ser querido que deseas comprender cómo se siente. Cuando la persona quiera hablar, escucha con atención, pero evita dar consejos u opiniones o juzgarla. Tan solo escucha y sé comprensivo. Esto puede ser una poderosa herramienta de curación.

Brinda un refuerzo positivo

Las personas con depresión pueden juzgarse duramente y encontrar errores en todo lo que hacen. Recuérdale a tu ser querido sus cualidades positivas y cuánto significa esta persona para ti y para otros.

Refuerza los logros

En toda depresión aparecen pequeños momentos de mejoría. Es aquí donde se deben reforzar positivamente los pasos conseguidos, como que la persona cuide su imagen un día o decida salir a dar un paseo. Debemos premiar de forma verbal y con cariño estos avances y nunca castigar los pasos hacia atrás.

Ayuda a crear un entorno con poco estrés

La depresión es un trastorno en el que la persona no elige su estado de ánimo. Entender que la situación no es voluntaria, nos acerca más a la otra persona y podemos, desde la empatía, comprender mejor su problema.

Haz planes juntos

Incentiva a tu ser querido a que vayan juntos a dar un paseo, que vean una película juntos o que hagan juntos algún pasatiempo u otra actividad que antes disfrutaba. Si accede a ellas, su mejoría podría ser más rápida. Sin embargo, no intentes obligar a la persona a que haga algo.

Aprende acerca de los síntomas de la depresión

Conoce los signos y síntomas de la depresión, para estar alerta sobre su estado y brindar apoyo oportuno y comprensión. Aquí los signos más comunes que pueden variar de una persona a otra:

 

  • Sentimientos de tristeza, ganas de llorar, vacío o desesperanza
  • Arrebatos de enojo, irritabilidad o frustración, incluso por asuntos de poca importancia
  • Pérdida de interés o placer por la mayoría de las actividades habituales o todas, como las relaciones sexuales, los pasatiempos o los deportes
  • Insomnio o dormir demasiado
  • Cansancio y falta de energía
  • Falta de apetito y adelgazamiento, o más antojos de comida y aumento de peso
  • Ansiedad, agitación o inquietud
  • Lentitud al razonar, hablar y hacer movimientos corporales
  • Sentimientos de inutilidad o culpa, fijación en fracasos anteriores o sentimiento de culpa por situaciones de las que no eres responsable
  • Dificultad para pensar, concentrarse, tomar decisiones y recordar cosas
  • Pensamientos frecuentes o recurrentes sobre la muerte, pensamientos suicidas
  • Problemas físicos inexplicables, como dolor de espalda o de cabeza

Conoce los signos de riesgo de suicidio

Si tu ser querido sufre una depresión grave, prepárate para la posibilidad de que, en algún momento, sienta deseos de suicidarse. Los signos de riesgo son:

 

  • Hablar acerca del suicidio; por ejemplo, hacer afirmaciones como «voy a matarme», «quisiera estar muerto» o «desearía no haber nacido»
  • Obtener los medios para un intento de suicidio, como comprar un arma o almacenar píldoras
  • Evitar el contacto social y desear estar solo
  • Tener cambios de humor, como pasar de estar eufórico un día a estar profundamente desalentado al día siguiente
  • Preocuparse por la muerte, por el hecho de morir o por la violencia
  • Sentir desesperanza o impotencia ante una situación
  • Aumentar el consumo de alcohol o de drogas
  • Sufrir cambios en la rutina normal, por ejemplo, cambios en la alimentación y en los horarios de sueño
  • Hacer cosas riesgosas o autodestructivas, como consumir drogas o conducir con imprudencia
  • Regalar las pertenencias o dejar en orden los asuntos materiales sin motivos lógicos para hacerlo
  • Despedirse de las personas como si la despedida fuera definitiva
  • Presentar cambios de personalidad o estar sumamente ansioso o agitado, en particular al tener algunos de los signos de advertencia antes indicados

Tómate en serio todos los signos de conducta suicida y actúa de inmediato

Adopta medidas, si fuera necesario:

 

  • Habla con el afectado sobre tu preocupación. Intenta averiguar o pregúntale si ha pensado en suicidarse o si tiene planificado cómo hacerlo. Tener un plan concreto indica que existe una mayor probabilidad de intento de suicidio.
  • Busca ayuda. Comunícate con el profesional de salud mental. Avisa a otros familiares o amigos cercanos sobre lo que ocurre.
  • Llama a una línea directa de prevención del suicidio. Si la persona está en peligro de lastimarse o suicidarse, llama a la línea de prevención de suicidios de tu localidad o a un número local de emergencias. Asegúrate de que alguien permanezca con esa persona en todo momento. (Si aún no conoces el número, infórmate desde ahora y agrégalo a tu celular).
  • Asegúrate de que la persona esté en un entorno seguro. En lo posible, retira o guarda bajo llave los objetos que podría usar para suicidarse. Por ejemplo, armas de fuego, otros tipos de armas y los medicamentos.

Cuídate

Apoyar a alguien con depresión no es fácil. Pídeles a otros familiares y amigos que te ayuden, y toma medidas para prevenir la frustración, así como el agotamiento. Busca tu momento para los pasatiempos, la actividad física, los amigos y la renovación espiritual.