FASE 1 / PREPARACIÓN
Módulo 2
TRASTORNO DE ANSIEDAD
Trastorno de Ansiedad
(TA)
Sentir un poco de ansiedad ocasionalmente es normal, pero cuando esta ansiedad es excesiva puede llegar a calificarse como un trastorno. Las personas con trastornos de ansiedad tienen preocupaciones y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones cotidianas. Cuando ese miedo o terror alcanza un máximo, entonces ocurre un ataque de pánico.
Esta ansiedad interfiere con la vida diaria, es difícil de controlar. Con el propósito de prevenir estos sentimientos y sintomas, el afectado evita ciertos lugares o situaciones.
Se puede tener más de un trastorno de ansiedad.
Tipos de Trastornos de Ansiedad
Trastorno de ansiedad generalizada
Tienes preocupaciones persistentes y excesivas por actividades, eventos o situaciones comunes del día. La preocupación es desproporcionada, difícil de controlar.
Trastorno de pánico
Implica episodios de ansiedad y miedo intensos que alcanzan un nivel máximo en minutos (ataques de pánico). Puedes tener sensaciones de una catástrofe inminente, dificultad para respirar, dolor en el pecho o latidos rápidos, fuertes o como aleteos (palpitaciones cardíacas). Estos ataques provocan preocupación de que sucedan de nuevo. El afectado tiende a evitar lugares donde cree que volverá a repetir la crisis (Agorafobia).
Agorafobia
Temes a lugares y situaciones que pueden causarte pánico o hacerte sentir atrapado, indefenso o avergonzado y por ello intentas evitarlos.
Trastorno de ansiedad social (fobia social)
Altos niveles de ansiedad y miedo a situaciones sociales debido a sentimientos de vergüenza, inseguridad y preocupación por ser juzgado o percibido de manera negativa por otras personas.
Fobias específicas
Ansiedad excesiva cuando la persona se ve expuesta a un objeto o situación específicos, y un deseo por evitarlos, como fobia a las alturas, a volar en avión, a algún animal, a las inyecciones, a usar el ascensor.
Trastorno por Estrés Postraumático
Es un trastorno que algunas personas presentan después de haber vivido o presenciado un acontecimiento impactante, terrorífico o peligroso.
Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)
Es una afección mental que consiste en presentar pensamientos (obsesiones) y rituales (compulsiones) una y otra vez. Estos interfieren con su vida, pero no puede controlarlos ni detenerlos.
IMPORTANTE
Este Plan de Ayuda no está dirigido para el trastorno obsesivo compulsivo. Este tipo de trastorno amerita un trato particular.
Síntomas del trastorno de ansiedad
Las crisis son respuestas anticipatorias e involuntarias del organismo frente a estímulos que pueden ser externos o internos (pensamientos negativos, creencias erróneas, situaciones que percibe como amenazantes o peligrosas). Estas respuestas constituyen los síntomas físícos y cognitivos de este trastorno:
- Nerviosismo, agitación, tensión muscular
- Sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe
- Aumento del ritmo cardíaco
- Respiración acelerada (hiperventilación)
- Sudoración (hiperhidrosis)
- Temblor del cuerpo
- Estrés, sensación de debilidad o cansancio
- Sequedad de la boca
- Mareos, inestabilidad
- Problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual
- Problemas para conciliar el sueño
- Problemas gastrointestinales (náuseas, diarrea, estreñimiento)
- Micción frecuente
- Dificultad para controlar las preocupaciones
- Necesidad de evitar las situaciones que generan ansiedad
- Desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (separarse de uno mismo).
Analizando el trastorno
La ansiedad es un sistema de alerta útil del organismo. Su función es advertir y activar al organismo, movilizarlo, frente a situaciones de riesgo cierto o probable, de forma que pueda salir airoso de ellas.
La ansiedad buena nos prepara de forma cognitiva (evaluamos el riesgo), fisiológica (activa el cuerpo para reaccionar mejor) y motora (estamos a la defensiva, buscamos seguridad).
Muchas de las cosas que nos van bien son debidas, en parte, al correcto funcionamiento de este sistema: evitamos actividades o lugares peligrosos, procuramos no llegar tarde al trabajo, plantamos cara a diferentes conflictos, nos preparamos para un examen o una reunión, buscamos apoyo para resolver un problema, minimizamos algunos contratiempos o buscamos formas de asumirlos y reformularlos.
El problema se da cuando la ansiedad excede el nivel de activación psicofisiológico que degenera en síntomas que interfieren notablemente en las actividades sociales, laborales o intelectuales. La gravedad de los trastornos de ansiedad se mide fundamentalmente por dos parámetros: el sufrimiento y la incapacitación que generan.
Los factores que actúan como mantenimiento de este problema son las situaciones capaces de activar la ansiedad. El miedo a estas situaciones y a los síntomas generados por la ansiedad, la multiplican. Esto lo convierte en un círculo vicioso sin salida.
La forma de cortar con ese círculo vicioso es retomando el control de lo que ingresa en la mente, reestructurando la forma de abordar las situaciones, mejorando la calidad de los pensamientos.
Trabajando en la parte cognitiva, se pueden cambiar los pensamientos, evaluando los riesgos de forma correcta y objetiva. Así se reduce la activación fisiológica y, a la vez, la intensidad de los síntomas.
ORIGEN
Los factores implicados en el origen del trastorno de ansiedad pueden ser del orden biológico que a la vez pueden ser heredados o no.
Por acontecimientos traumáticos. Las personas con determinados tipos de personalidad -como las personas altamente sensibles- son más propensas a sufrir trastornos de ansiedad que otras.
También es casual los antecedentes de familiares o padres autoritarios, críticos, violentos, explosivos o descalificadores, y, por otro lado, los sobreprotectores.
SI ESTÁ EN TUS POSIBILIDADES, BUSCA TRATAMIENTO MÉDICO
Si no recibes tratamiento, el trastorno puede empeorar y llegar a afectar casi todas las áreas de tu vida. Un trastorno de ansiedad puede dar origen a otro trastorno de ansiedad y/o depresión.