El pensamiento crítico mejora la calidad de tus pensamientos

El pensamiento crítico es una forma de pensar de las personas genuinamente interesadas en obtener conocimiento y buscar la verdad. Es un ejercicio de reflexión que, para poder ser desarrollado, requiere flexibilidad para considerar alternativas y opiniones, la comprensión de las opiniones de otras personas, la justa imparcialidad en valorar razonamientos y la honestidad para encarar los propios prejuicios, estereotipos, tendencias egocéntricas y sesgos cognitivos.

El pensamiento crítico nos sirve para no dejarnos llevar por la opinión de los demás y sopesar con detalle antes de considerar si esas opiniones son totalmente ciertas y correctas.

El pensamiento crítico busca tener una idea justificada de la realidad y no aceptar ciegamente lo que otros nos digan. No se trata de llevar la contraria al mundo, sino de ser capaces de elaborar nuestro propio punto de vista en base a la comprobación de la información.

No se trata de llevar la contraria al mundo, sino de ser capaces de elaborar nuestro propio punto de vista en base a la comprobación de la información.

El pensador crítico es capaz de analizar situaciones, información, argumentos. Busca la verdad en las cosas y llega a conclusiones razonables en base de criterios y evidencias.

Existen muchas maneras en que podemos cuestionar en base a preguntas lo que aprendemos, lo que leemos, decimos, lo que pensamos, lo que dicen los demás y lo que quieren decir. La idea es que practiques con la frecuencia necesaria este tipo de preguntas para que se conviertan en algo natural en ti.

En la medida que lo vayas consiguiendo, tendrás más y más control de tus pensamientos, y mediante ese control, gestionarás tus emociones y tu vida.

Todo el mundo piensa; es parte de nuestra naturaleza. Pero mucho de nuestro pensar, por sí solo, es arbitrario, distorsionado, parcializado, desinformado o prejuiciado.

Lee y analiza los rasgos de un buen pensador crítico, esto te dará ideas de lo que puedes hacer para adoptar este tipo de pensamiento.

EVALUATIVO

Auto motivado para la búsqueda de la verdad, lo razonable, lo evidenciable. Es un formulador de preguntas.

“¿Estas seguro que eso es así?”, “Si eso fuera cierto entonces X e Y también lo sería”, “¿En qué estás basando tus afirmaciones?”

AUTOCONCIENTE

Es capaz de reconocerse cuando se está dejando llevar por el ego, sesgos o prejuicios.

“Me dejé llevar por la información televisiva”, “Tengo que reconocer que me equivoqué al afirmar que la vida social no es tan importante cuando la verdad es que sí lo es, la razón por lo que dije eso es porque a mi no me atrae mucho la vida social y disfruto mis días con o sin amigos”.

HUMILDAD INTELECTUAL

Reconoce los límites de sus conocimientos y reconoce también sus equivocaciones, en un plano de autorregulación.

“No estoy seguro de la veracidad de lo que me dices. Buscaré más información”, “De eso no tengo idea, pero suena interesante. Investigaré”, “Te podría dar mi opinión, pero puedo equivocarme porque la verdad es que no domino el tema”, “Así es, disculpa, en eso tienes mucha razón, yo me equivoqué”. “Estás en lo correcto”. “Estoy de acuerdo contigo, no pudiste decirlo mejor”.

HONESTO

Es capaz de reconocer cuando su punto de vista está influenciado por impulsos emocionales, motivos egoístas, intereses, etc.

“Sí, creo que me sobrepasé, no era necesario ser tan incisivo”, “Sí, debí haber considerado ese punto, pero me dejé llevar en ese momento por lo que me era más favorable”.

MENTE ABIERTA

Evalúa los diversos puntos de vista, valora nuevas alternativas y, con la mente despierta y atenta, busca lo razonable y evidenciable.

“También me gustaría escuchar tu posición al respecto”, “Admito que en eso tienes razón”.

CORAJE INTELECTUAL

Reconoce la manipulación y los reclamos irracionales. Identifica falacias y argumentaciones engañosas.

“Disculpa pero lo que estás diciendo no tiene sustento”, “Que Ud. hablé con voz fuerte no significa que Ud. tenga razón”, “Perdóneme pero eso está solo en su imaginación. Demuéstreme lo que está afirmando”

JUICIOSO

Reconoce la relevancia de otros puntos de vista en su propia medida sin caer en apasionamientos. Evita los juicios apresurados. Emite juicios basados en evidencias y está dispuesto a cambiarlas a la luz de nuevos hechos.

“Lo que dices me parece razonable pero…”, “Creo que en eso estamos de acuerdo. Sin embargo…”, “No sabía eso. Sin duda lo tomaré en cuenta”, “No hay duda, eso lo cambia todo”.

CREATIVO

Encuentra similitudes y analogías que no son visibles.

“Que hayas fallado una materia no significa que siempre fallarás. Si lanzas el anzuelo y no pescas ni un pez no significa que no pescarás. Elige un día soleado y cambia tu carnada por otra mejor y verás que sí pescas. Así también puedes pensar en una estrategia para aprobar tus materias.»

ANALÍTICO

Anticipa las probables consecuencias de acciones alternativas.

“Si tomas esa opción tendrás más problemas porque…”, “Tienes que tomar en cuenta que si decides aquello…”, “ Estoy seguro que esta seria la mejor solución”.

IMPARCIAL

Usa evidencias de forma imparcial. Mira diferentes puntos de vista y se orienta por la razón.

“Aunque no me guste tengo que admitir que lo que dices es cierto”, “Esta postura es la más razonable y sensata, aunque vaya en contra de nuestras creencias y costumbres”.

MOTIVADO

Busca estar bien informado.